Cuba avala el matrimonio igualitario.
El Consejo Electoral Nacional (CEN) confirmó hoy la aprobación del matrimonio igualitario en Cuba como parte de un nuevo Código de Familias respaldado por el voto a favor de 66.87 por ciento de 6.2 millones de votantes en controvertido e inédito referéndum realizado el domingo en el país caribeño.
El nuevo Código de Familias legaliza el matrimonio entre personas del mismo sexo, la adopción gay y el vientre subrogado, ubicando a la isla en la vanguardia de América Latina en esta materia.
La titular del Consejo Electoral Nacional (CEN), Alina Balseiro, proclamó la aprobación de la nueva ley y alegó “que la tendencia (de la votación) es irreversible porque solo quedan por consolidar los datos de 36 circunscripciones”.
Prometió además que en las próximas horas se emitirá un parte definitivo de los resultados del pronunciamiento popular, que transcurrió en una jornada dominical signada por intensos aguaceros en varias provincias debido al avance hacia Cuba del huracán Ian, que debe golpear el occidente del país en la madrugada de mañana.
Balseiro dijo que “ejercieron el voto seis millones 251 mil 786 electores de los ocho millones 447 mil 467 registrados (en el padrón), para un 74.01 por ciento de participación”.
Agregó que los votos por el Sí sumaron 3.9 millones, lo que equivale al 66.87 por ciento de aprobación. Por el No lo hicieron 1.9 millones de cubanos para 33.13 por ciento. El total de boletas válidas fue 5 millones 892 mil 705, lo que representa 94.25 por ciento.
Este informe preliminar se prolongó varias horas “por dificultades en muchas zonas afectadas por la lluvia”, según el CEN. Ello motivó que en siete de las 15 provincias cubanas y en el Municipio Especial Isla de la Juventud se extendiera la votación una hora más de lo previsto.
El conteo de los votos se hizo manualmente y de forma pública, pero sin supervisión internacional. Los colegios electorales abrieron sus puertas a las 07:00, hora local del domingo y se mantuvieron activos hasta las 19:00 horas.
Por ley, la participación de los cubanos en este tipo de consultas es voluntaria. Sin embargo, el gobierno realizó una intensa propaganda a favor de la aprobación del código desde hace más de un mes.
